Radical

El reparto mexicano está encabezado por el reconocido actor Eugenio Derbez, que también es uno de los productores de la película. El director y guionista Christopher Zalla nació en Kenia, creció en el extranjero y habla español con fluidez. La película muestra cómo los roles tradicionales de género y las privaciones económicas perpetúan la pobreza: una niña de 12 años debe abandonar la escuela y cuidar de sus hermanos para que sus padres puedan trabajar muchas horas. La mayoría de los personajes masculinos son empáticos, y las personas empobrecidas son tratadas con respeto y dignidad, alejándose de los estereotipos negativos. Una de las alumnas de sexto curso, Paloma, es una chica tímida que se siente menospreciada/juzgada porque vive junto al vertedero, pero en realidad es muy inteligente (quizá hasta genio).

La ciudad mexicana de Matamoros es retratada como un lugar violento, casi militarizado, debido al tráfico de drogas. Se oyen tiroteos y en las calles se ven brevemente los cuerpos ensangrentados de víctimas de disparos; algunos están cubiertos con sábanas. En un enfrentamiento, un niño resulta muerto, aunque esto no se muestra en pantalla. Menores participan en la venta de drogas. Un villano pregunta a una niña si es virgen e intenta secuestrarla, pero otros intentan defenderla y no lo permiten.

Un chico de unos 12 años está interesado en su compañera de clase y pregunta a su maestro cómo conseguir que ella se fije en él. El maestro le dice que depende de él mostrar interés por las cosas que le importan a la chica. Ella le da un beso al niño en la mejilla. Un hombre en shorts y sin camiseta se zambulle en un tanque de agua.

Las palabras/expresiones en español incluyen "cabrón", "pinche", "gordo", "cállate", "partir madre", "m----a". Una alumna dice que su compañera "huele a basura".

Dos adultos beben una cerveza mientras hablan.